El Partido Popular, en la oposición, ha denunciado la «pasividad» del alcalde Antoni Servera «al no exigir el a Aguas Son Sard», concesionaria del servicio, «que rebaje el precio del agua tal y como prometió hace seis meses».
El portavoz de los populares, Jaime Servera, recuerda que la empresa estaba obligada a comprar «mil metros cúbicos diarios para el suministro a Salvador Artigues, ante la existencia de un contrato firmado en 1971 y con vigencia de 50 años».
Ante el fallecimiento de Artigues, en el pleno del pasado enero, el equipo de gobierno aprobó la rescisión del contrato con los votos en contra del PP. Según Servera, «desde el 1 de marzo, Aguas Son Sard no compra agua del pozo de Artigues lo que, de acuerdo con su oferta, le obliga a rebajar el precio de su tarifa», criterio que comparten los técnicos municipales.
Según el PP, «el alcalde manifestó una rebaja de unos diez céntimos pero seis meses después estamos ante un enriquecimiento injusto de la empresa concesionaria».