Pasadas las cinco y media, la presidenta del Consell de Mallorca, la inquense Maria Salom, ha cortado la cinta que simbólicamente envolvía la fira más grande y más multitudinaria de Mallorca: el Dijous Bo.
A su lado, el alcalde de la localidad, Rafel Torres, y los demás regidores del Consistorio, han asistido al acto, que simboliza el pistoletazo de salida a la fira de fires. Cabe destacar que algunos de los regidores de la oposición han mostrado su apoyo a los docentes en huelga luciendo la ya conocida camiseta verdes.
Normalmente, las autoridades palmesanas no suelen estar presentes en Inca el miércoles y la presencia de Salom ha estado quizás motivada por el pleno que debe presidir el jueves, en el que se aprobará destinar 80.000 euros anuales a Inca durante 10 años para financiar la rehabilitación del Teatre Principal.
En su discurso, el alcalde ha deseado que la lluvia no impida a los inqueros y visitantes disfrutar de la feria y que ésta resulte «placentera para todos». Asimismo, ha asegurado que Inca «está preparada para recibir miles de mallorquines» y les ha invitado a acercarse a Inca.