La crisis económica de los últimos tiempos también afecta a los talleres de formación que ayudan a la inserción laboral. Así lo denunció ayer la regidora de Formación del Ajuntament de Inca, Yolanda Pericás, que criticó «el recorte de hasta el 50 por ciento de ayudas que ofertaba el Govern balear para subvencionar las escuelas taller y los talleres de ocupación para adultos». De esta manera, los cursos formativos han pasado de tener una ayuda que ascendía hasta 1.053.668 euros a los 560.902 euros, por lo que desaparecen dos talleres de ocupación.
El alcalde de la ciudad, Rafel Torres, consideró ayer que «desde el Ajuntament entendemos que es el momento en que se debe apostar más para la inserción laboral y ayudar así a las personas que se encuentran en situación de paro. Se debe invertir más que nunca en la formación de las personas». En este aspecto, Torres mostró su preocupación y malestar porque «después de años llevando a cabo diferentes cursos, ahora nos encontramos que todo el trabajo realizado no sirve de nada».
Formación
El área de Formación del Ajuntament de Inca funciona mediante proyectos subvencionados por el Govern a través de la Conselleria de Treball. Pericás explicó que «presentamos una escuela taller de jardinería y dos talleres de ocupación (uno de carpintería y otro sociosanitario) y sólo se ha aprobado poder ejecutar la escuela taller por lo que no podemos ofertar ningún curso para adultos que son los que realmente padecen los problemas de la crisis por sus cargas familiares».
El servicio de orientación laboral también ha padecido un recorte del 10 por ciento, mientras que la ayuda a los cursos formativos también se ha rebajado en un 15 por ciento con respecto al año pasado.
Además, se ha suprimido un proyecto piloto que se inició el año pasado y que afectaba a 20 jóvenes. La regidora Pericás explicó que «durante las mañanas, los jóvenes trabajaban cuatro horas en diferentes áreas del Ajuntament, mientras que por las tardes debían estar matriculados en un instituto para estudiar. Este proyecto también ha quedado sin subvención».
«El área de formación es una esperanza para las personas que están en situación de paro», señaló el alcalde Rafel Torres, que pidió al Govern que «reflexione sobre el recorte de ayudas a los cursos, porque la mejor manera de ayudar a los ciudadanos actualmente es ofrecerles un lugar de trabajo e invertir para que puedan acceder a él». En este sentido, Torres aseguró que «desde el Ajuntament hemos evitado el recorte del área de formación porque para muchas personas es la única salida que les queda para acceder al mercado laboral».