A falta de un museo etnológico de la localidad, vieja reivindicación de los rectores municipales, la historia andritxola se expresa ahora al aire libre.
Dos carruajes históricos, uno dedicado al reparto de carne por cuenta de la municipalidad y otro de pompas fúnebres, que prestaron sus servicios durante buena parte del siglo XX en Andratx, se exponen desde ayer, perfectamente restaurados, en la antesala del Ajuntament, en Son Mas.
Recuerdos
La segunda parte del llamado 'Plan E', con el que el Gobierno de España abrió a los municipios este año la posibilidad de abordar determinados proyectos que durante años no habían cabido en sus presupuestos, llevó al actual equipo rector del Ajuntament a solicitar una cantidad cercana a los 20.000 euros para devolver el lustre a esos dos vehículos formado por un armazón y montados sobre ruedas, en ambos casos de madera.
La alcaldesa de Andratx, Isabel Alemany, se mostró ayer «emocionada» al contemplar en Son Mas el resultado del minucioso proceso de restauración de los carruajes, «de cuyo ir y venir por el pueblo todavía muchas personas conservan innumerables recuerdos de su niñez».
Identidad
Alemany señaló a Ultima Hora que «cuantos han tenido y tenemos responsabilidades en el Ajuntament, pero estoy segura de que también los que nos sucedan, trabajaremos por la consecución de un lugar digno para conservar y mostrar a nuestros convecinos y a los visitantes los hitos históricos de Andratx al menos de los dos últimos siglos».
Entre esas señas de identidad del municipio, Isabel Alemany se refirió especialmente a elementos de la tradición marinera de Andratx «que todavía son físicamente susceptibles de restauración y podrían ser puestos en valor para que los disfrutásemos».