El Ajuntament de Pollença pedirá permiso a la Demarcación de Costas de Balears para explotar los amarres de Formentor instalados cuando era ministro de Medio Ambiente, Jaume Matas y que hasta ahora gestionaba la sociedad Hisambla, con la oposición del Consistorio pollencí.
El equipo de gobierno municipal (UM-UNPI/PSOE y PSM) ya ha anunciado su intención de conceder la explotación de los amarres a una empresa privada, una vez obtengan el permiso de Costas, si bien con este nuevo sistema el Ajuntament podrá tener un mayor control sobre la gestión de las instalaciones, garantizando mejores condiciones para los usuarios y vigilando que se minimice el impacto medioambiental de los fondeos. La gestión de los fondeos de Formentor durante todos estos años no ha estado exenta de polémica. En noviembre de 2001, fecha del gran temporal, las cadenas causaron importantes daños en las praderas de poseidónea, según pudo comprobar el propio Ajuntament que, desde entonces, ha realizado un exhaustivo seguimiento de los muertos, programando distintas inmersiones con el único objetivo de fotografiar sus efectos.
Los daños eran una consecuencia directa del incumplimiento del contrato de explotación por parte de la sociedad Hisambla ya que el pliego de condiciones que redactó Costas obligaba a retirar los muertos después de cada temporada turística. A pesar de esta irregularidad y de las posteriores denuncias de la Asociación de Navegantes porque Hisambla excedía la superficie de ocupación autorizada, Costas renovó la concesión a Hisambla. El Ajuntament ha emitido a lo largo de todo este tiempo informes contrarios a la renovación de la concesión pero no ha sido hasta ahora cuando ha expirado definitivamente el contrato con Hisambla.