El pleno de Santa Margalida rechaza suspender las licencias urbanísticas de todas aquellas promociones de más de dos viviendas por solar en el suelo urbano del núcleo de Santa Margalida y en el casco antiguo de Can Picafort. El equipo de gobierno municipal (PP-CPU) se abstuvo en la sesión del lunes a la hora de votar la urgencia de esta propuesta presentada por el PSOE que, por lo tanto, ni siquiera se sometió a votación.
Hasta ahí nada nuevo. Pero el equipo de gobierno municipal liderado por Martí Torres, entró por primera vez en este debate ante un pleno abarrotado de público. Según Torres, la moratoria no se puede aprobar tal y como la propone el PSOE «por razones técnicas, porque ya se han hecho muchas suspensiones». Sin embargo, anunció que el equipo de gobierno municipal (PP-CPU) está trabajando en un plan específico y aseguró que: «Estoy convencido de que pronto estaremos en condiciones de paralizar los plurifamiliares en Santa Margalida y en Can Picafort en un sentido muy similar al que tu propones», dijo dirigiéndose al portavoz socialista. Desde el PSOE opinan que la moratoria es posible porque su propuesta implica una modificación sustancial de la normativa urbanística por lo que no ven ningún impedimento técnico. Así, acusan a PP y CPU de querer «vender cortinas de humo». Tampoco salió adelante la propuesta de los socialistas de Santa Margalida para instar al Govern a paralizar las licencias que se tramitan en el suelo rústico del municipio para construir hasta doce parques fotovoltaicos. Los socialistas presentaron la propuesta como una enmienda a una moción de UM que sí se aprobó por unanimidad para instar al Govern a que devuelva a los ayuntamientos las competencias sobre este tipo de proyectos.