La protección de Cala Blanca vuelve a ser objeto de debate en el Consell de Mallorca. El pasado febrero, todos los grupos de la institución aprobaron una moción que protegía de forma cautelar este paraje sobre el que pesaba la sombra de la construcción de un hotel de trescientas habitaciones y cinco estrellas.
Ese acuerdo suponía una modificación cautelar del Plan Territorial de Mallorca. El Consell disponía de un plazo de seis meses para hacer efectiva la decisión. Los portavoces del PP en la administración insular y en el Ajuntament de Andratx, Jaume Font y Jaume Porsell, señalan que ese plazo ha vencido e instarán mediante sendas mociones a que se proteja de forma efectiva la cala. «Llevan cien días y no han hecho absolutamente nada para arreglar esta situación», señala el dirigente municipal. Para los populares, al no haberse producido la aprobación definitiva, Cala Blanca ha quedado desprotegida por silencio administrativo. En su opinión, el proceso debe retomarse desde el mismo punto en el que se encontraba en el mes de enero. Así, Font considera: «El Govern tiene ahora una oportunidad de oro para poner en práctica su coherencia política», aunque cree que «queda en evidencia la dejadez de funciones del Consell de Mallorca en este asunto» y también que «las formaciones políticas de izquierda» que « exigen mucho cuando están en la oposición, pero no hacen nada cuando gobiernan».