El próximo lunes, tal y como estaba previsto, el ferrocarril de Sóller iniciará el segundo «asalto» en pocos meses a la renovación parcial de la vía que discurre entre la Vall y Palma, si bien los planes iniciales de cambiar algunos kilómetros de vía en la zona de Son Sardina se verán alterados por la imperiosa necesidad de realizar modificaciones puntuales en otros tramos del trazado que revestían mayor atención.
Así, las obras del metro de Palma en Son Sardina obligarán al ferrocarril de Sóller a concentrar sus esfuerzos en esa zona. Por ese motivo, se deberá quitar parte de la catenaria así como unos 400 metros de vía, que serán sustituidos por vías de 45 kilógramos y unos nuevos cambios, que permitirán ser mecanizados, reconstruyendo de ese modo el desvío que ya existía anteriormente en esta estación.
Al respecto, el jefe de circulación y de explotación, Antoni Cifre, confesaba que «no será una actuación fácil en Son Sardina, pero lo importante es que ese trozo de trazado quedará ya totalmente nuevo». Estas obras se llevarán a cabo conjuntamente con la empresa constructora del metro de Palma.
Además, también se realizarán otras actuaciones en tres o cuatro puntos de Bunyola a Sóller, con la intención de dejar el trazado en unas óptimas condiciones.