El proyecto de Ley para la Conservación de Espacios de Relevancia Ambiental (Leco) prevé la modificación de la declaración de protección de s'Albufereta de Pollença para abrir más el espacio natural al uso público. En la anterior legislatura, el Pacte de Progrés declaró la primera Reserva Natural de las Islas. Esta declaración establecía que s'Albufereta por su fragilidad e importancia debía preservarse de manera integral con todos los procesos ecológicos naturales que se producen, «no siendo compatibles ni los usos ni la ocupación humana ajenas a las finalidades científicas». La nueva ley de conservación de los espacios naturales que promueve ahora el Govern popular, a través de la Conselleria de Medi Ambient, prevé la declaración de s'Albufereta como Reserva Natural Especial, «admitiendo un uso humano moderado de carácter tradicional y un uso educativo y científico».
Joana Xamena, directora general de Biodiversitat, explicó ayer a este diario que «no se trata de rebajar el nivel de protección sino de ampliar el uso público, puesto que se trata de una zona donde el hombre y el entorno han coexistido». La declaración como Reserva Natural Especial también incluye la visita al espacio protegido «debidamente controlada». A juicio de Xamena, la declaración de Reserva Natural «no fue la más adecuada», ya que se puede admitir «un uso humano moderado». El Centro de Información Geográfica realizará un detallado estudio de s'Albufereta y determinará el número de visitas que puede recibir este espacio natural.
Ubicada entre Alcúdia y Pollença, s'Albufereta es una de las zonas húmedas más importantes de la Isla. La zona ya estaba protegida por la Ley de Espacios Naturales, puesto que era Àrea Natural de Especial Interés (ANEI); algunos usos estaban restringidos pero no estaba determinada la gestión. La declaración de Reserva Natural tuvo lugar en el año 2001 y fue promovida por el equipo que dirigía la ex consellera de Medi Ambient Margalida Rosselló. La Reserva Natural es un nivel de protección superior al parque natural. Un parque protege una zona donde hay actividades humanas y económicas compatibles con la conservación. La reserva establece zonas de nula o muy baja actividad humana. S'Albufereta abarca 500 hectáreas y 200 son Reserva Natural.