Los comerciantes, artesanos, empresarios y fabricantes no fallaron y llenaron todos los puntos de exposición que el Ajuntament de ses Salines dispuso para la celebración de la Fira Espectacle del 1 de mayo. Sin embargo, lo que sí falló fue el constante flujo de visitantes que aunque se elevaron 15.000, fueron menos que en ediciones anteriores de la muestra salinera.
Entre los asistentes, el comentario era precisamente que «hay menos gente» y algunos se aventuraban a dar una explicación: «Será porque es sábado». «Es porque no ha venido Ana Botella», comentaba un vecino en referencia a la visita de la esposa de José María Aznar el año pasado.
La Fira fue muy completa en cuanto a oferta artesanal y cultural pero el público echó en falta las notas de color y espectáculo aéreo de 2002 con la Patrulla Aguila o la exposición de motos del año pasado. Así, el espectáculo equestre fue el acto más concurrido y aplaudido por los asistentes.
Entre las autoridades estuvieron, el alcalde, Sebastià Vidal; el president del Parlament, Pere Rotger; el conseller d'Interior, José Maria Rodríguez, y el conseller de Cooperació Local, Miquel Riera.