El Pla Territorial de Mallorca permite el campo de golf de es Pujol pero no la nueva urbanización; tres zonas residenciales (chalets, apartamentos adosados, complejos comerciales, etc), sumando un total de 1.344 habitantes a menos de un kilómetro de s'Alqueria Blanca. Actualmente, la superficie natural afectada por el proyecto, unas 56 hectáreas, es de carácter rústico. La promotora, es Pujolet SA, tiene desde el año 1997 el plan parcial aprobado. El Consell sólo puso como condiciones que se garantice el suministro de agua y un proyecto de impermeabilización. En el enclave se halla un acuífero.
Sin embargo, en 1999 el Consell modificó los terrenos, de urbanizable a rústico, decisión que la empresa recurrió. El año pasado, una sentencia favorable a la promotora señaló: «El Consell no tiene competencias para desclasificar». Ante esto, la institución insular interpuso un recurso de casación en el Supremo, que ha sido admitido a trámite. Y en estos momentos los implicados están pendientes de la resolución.
En caso de que la sentencia sea favorable al Consell, se prevé que no se construya ni golf ni urbanización. El PSM ya reclamó la «preservación total» de es Pujol, y admitió que es Pujolet SA pueda ser indemnizada. Por su parte, los dos concejales de UM de Santanyí, Catalina Burguera y Ferran Ribot, visitaron ayer la zona. Respecto a lo contemplado por el Pla Territorial, ambos se mostraron «muy satisfechos. El cambio de uso, de residencial-hotelero-deportivo a de servicios y equipamiento, es muy buena solución, así se evitará pagar cualquier indemnización, dando seguridad jurídica a todos». «No estamos a favor de la masificación que se produciría con la construcción del proyecto en su conjunto. Únicamente con el golf y su respectivo edificio de recepción y algún posible servicio y equipamiento, en Santanyí conseguiríamos atraer un turismo de calidad, que tanta falta nos hace. Por supuesto tenemos en cuenta como garantizar el abastecimiento de agua».