La polémica sobre el proyecto de la autovía Inca-Manacor volvió a protagonizar el pleno del Ajuntament de Petra. El pasado jueves, más de 60 vecinos llenaron de nuevo la sala de actos. Miembros de la plataforma en contra de la autovía exhibieron una pancarta y también presentaron una moción contra el proyecto. La sorpresa fue que los dos ediles de UM se adhirieron a los cinco del PSM. Por su parte, el PP excusó su voto diciendo que las mociones «deben de ser presentadas a través de un partido político. No puede ser que el Betis o el Barcelona vengan aquí y digan votadnos esta moción». De cualquier manera a pesar de no votar, el portavoz del PP Joan Font no tuvo inconveniente alguno en pronunciarse a favor de la autovía, si bien demostró cierto desconocimiento sobre la proyectada autopista por Campos y Felanitx, finalmente descartada a raíz de la oposición frontal de la alcaldesa de Felanitx, Catalina Soler.
Miquel Jaume, portavoz de UM, reiteró el posicionamiento contrario de la agrupación y afirmó: «Somos conscientes que esto es resultado de un pacto. Y estar de acuerdo dentro de un pacto es duro. No consideramos que hacemos un fraude». En este sentido aludió al apoyo del PSOE insular al desvío del tren y la decisión del PSM de dar luz verde al tercer horno de la incineradora. Asimismo, Jaume felicitó la labor de la plataforma contraria a la autovía, advirtiendo sin embargo de la implicación directa del PSM.
Curiosamente, el pleno no contó ni con el secretario Francisco González (de vacaciones) ni tampoco con el alcalde Joan Font (de trabajo solidario en Nicaragua). Ocuparon sus cargos el funcionario Miquel Febrer y la edil Caterina Mas. El retrato del Rey permaneció oculto detrás de las cortinas.
En dos momentos del pleno, algunos de los asistentes aplaudieron intervenciones protagonizadas por los políticos.