La misma semana de las elecciones del 25-M fueron adjudicadas las últimas playas de Calvià y el resultado ha motivado numerosas quejas entre algunos de los concursantes que han quedado sin concesión administrativa para explotar las hamacas, sombrillas y atracciones náuticas estivales. De hecho, varios de ellos han decidido recurrir las concesiones. Varios concursantes han expresado a Ultima Hora que ha habido «favoritismos» por parte del equipo socialista a la hora de adjudicar las playas para los próximos cinco años. Un concursante que durante los últimos 30 años ha alquilado velomares y embarcaciones de recreo y ahora ha quedado sin negocio explicó a este periódico que ha sido descartado «porque la oferta no estaba bien especificada».
Los anteriores explotadores de las playas más rentables (Peguera, Magaluf y Palmanova) prácticamente son los mismos de la anterior concesión, si bien ha habido algunos cambios. Otro antiguo concesionario que no repite y que ha expresado sus quejas es el de la playa de Portals Nous, una playa que durante los últimos años ha sufrido numerosos cierres a causa de averías en la red de alcantarillado y en la estación de bombeo de aguas fecales. Por cada cierre, ajeno siempre al concesionario, éste percibía una simbólica y mínima indemnización.
Las asociaciones de vecinos y hoteleros de Peguera, juntamente con la empresa Llabrés Feliu (explota la ORA en Calvià), también se consideran perjudicadas. El presidente de los hoteleros de Peguera, Luis Carrasco, entiende que su oferta «era la más ventajosa» y avanzó que recurrirá la concesión. El portavoz del PP de Calvià y candidato más votado, Carlos Delgado, indicó a este periódico que «el expediente debería ser revisado por si hay irregularidades». También recordó que el PP ya recurrió a los tribunales contra las bases del concurso. Isidre Cañellas, concejal de UM, dijo que «si hay recursos, deberá ser el nuevo consistorio el que se pronuncie».