La antigüedad de los autobuses de transporte regular se ha rebajado, en un periodo de más de dos años, de una media de casi catorce años (13,95) a una media 8,68 años, según datos facilitados por la Direcció General de Transports. El programa de renovación de la flota puesto en marcha en el año 2001 ha permitido que la vida media de los autocares haya disminuido en aproximadamente 37,76 por ciento.
En total, 17 de 25 concesionarios existentes han actualizado la flota de autocares, lo que representa un 68 por ciento de las empresas adjudicatarias del servicio de transporte regular. En cuanto a los vehículos, se han renovado 88 de un parque móvil total de 132, es decir, un 66,6 por ciento.
La Conselleria d'Obres Públiques mantiene desde hace dos años un programa de inversiones para la renovación y la modernización de la flota y su adaptación a las personas con movilidad reducida. De hecho, entre los años 2001 y 2002, las ayudas para este fin fueron 1.245.645,71 euros. En 2003, la Conselleria d'Obres Públiques destinará 1.335.269 euros. El objetivo de Transports es mantener en 2004 esta línea de ayudas y condicionarla a la adaptación tecnológica de los autocares a los discapacitados físicos para ayudar a incrementar el número de vehículos sin barreras arquitectónicas.