Las fuertes lluvias caídas el pasado martes inundaron los corrales de la finca de Son Navata Vell de Felanitx provocando la muerte por ahogamiento de una docena de ovejas. Sin embargo, Pedro Bover, el agricultor encargado de la finca, ya se ha acostumbrado a perder animales de esta manera. En noviembre de 2001 murieron unos diez cerdos y las inundaciones provocaron el aborto de varias cerdas.
El agricultor explica que las inundaciones son provocadas por el desbordamiento de un embalse donde el Ibasan, perteneciente a la Conselleria de Medi Ambient, conduce las aguas de la depuradora.
El problema es que las aguas pluviales también se dirigen al mismo lugar y cuando llueve se inundan los terrenos. Desde el suceso de 2001 Bover pide soluciones a la Conselleria de Medi Ambient y al Ajuntament de Felanitx pero «no me han hecho caso, muchas promesas y nada más».