La presidenta del Consell Insular de Mallorca, Maria Antònia Munar, cuestionó ayer el proyecto de la carretera de Manacor y calificó de «una pasada» que el diseño incluya una rotonda cada 2'5 kilómetros. «Hay que buscar una alternativa a las rotondas y debe prevalecer el sentido común. Las rotondas pararían el tráfico y provocarían un incremento de la contaminación debido a que los vehículos se verían obligados a reducir de marcha y aumentar la emisión de gases», justificó Munar, quien recordó que el proyecto presentado por el Govern para la carretera Palma-Manacor «no es el definitivo». Munar cree que el 80 por ciento de la población mallorquina piensa igual que ella en relación a las rotondas.
Además, Munar recordó que las competencias de carreteras serán transferidas a los consells, y que será su departamento el que decidirá el diseño definitivo del proyecto de la carretera Palma-Manacor. En este sentido, el Consell deberá pronunciarse a favor o en contra del proyecto del Ejecutivo y remitir un informe a la Conselleria d'Obres Públiques. El Consell propondrá que se sustituyan rotondas por pasos a nivel en algunos tramos de la carretera, según explicó el nuevo coordinador del área, Gonzalo Aguiar.
Por otra parte el conseller d'Obres Públiques, Vivenda i Transports del Govern, Josep Antoni Ferrer, afirmó ayer que el proyecto final de desdoblamiento de la carretera Son Ferriol-Montuïri podría reducir el número de rotondas previsto en el estudio informativo, que se cifra en once. Ferrer, que ayer visitó las obras de desdoblamiento del tramo de Palma-Son Ferriol de la carretera de Manacor, señaló que «lo que presentamos el día 13 de junio es un estudio informativo del tramo Son Ferriol-Montuïri, que ahora está en exposición pública, lo que no quiere decir que el proyecto definitivo se realice tal y como está reflejado en el estudio técnico», y calificó de «desmesuradas» las críticas que han surgido desde que el estudio fue presentado a los medios de comunicación.
El conseller d'Obres Públiques insistió en que «los mismos técnicos que han hecho el estudio seguirán estudiando y afinando el proyecto con las aportaciones de las alegaciones» e indicó que «una vez abierto el debate público si los partidos políticos, la Jefatura de Tráfico, asociaciones empresariales y ciudadanas quieren opinar, pueden hacerlo. Desde el Govern se tendrán en cuenta las distintas opiniones porque nuestra intención es que se construya una carretera lo mejor y más segura posible», afirmó.