El grupo municipal del PSOE de ses Salines ha criticado el impacto ambiental que puede suponer la construcción del paseo marítimo peatonal en la costa de la Colònia de Sant Jordi. El proyecto ha sido redactado por el Ministerio de Medio Ambiente, costará 520 millones de pesetas y será pagado por el Gobierno central. Esta cantidad ha sorprendido a los socialistas porque «cuando en 1997, estábamos en el equipo de gobierno e impulsamos este proyecto, lo presupuestamos en 200 millones de pesetas. Esta cantidad se ha multiplicado y tenemos nuestras dudas sobre el posible impacto medioambiental».
El edil socialista ha concretado que «hemos visto que en algunas zonas el paseo se acerca demasiado al mar. Además, incluye la colocación de farolas de 12 metros de altura y un muro por todo el recorrido que pueden provocar un fuerte impacto visual tanto de tierra hacia el mar como a la inversa. Por estas razones, creemos que todos los partidos deben decir algo y presentar alegaciones».
El alcalde de ses Salines, Antoni Caldentey (UM), explica al respecto que «aunque el Ajuntament no ha participado en la redacción del proyecto, el equipo de gobierno irá 'a muerte' con el proyecto porque creemos que es una mejora muy importante y necesaria para la Colònia». Aunque matizó que «aún no nos hemos estudiado el proyecto de forma concienzuda, teníamos previsto reunirnos para verlo».
Caldentey quiso matizar las declaraciones de su antiguo socio de gobierno socialista y explicó que «cuando Perelló salió del equipo de gobierno no sabía ni cómo estaba el proyecto. No estaba ni proyectado ni presupuestado por el Ministerio y en el último año hemos conseguido ambas cosas». El paseo marítimo peatonal ocupará tres kilómetros de la costa de la Colònia de Sant Jordi. Concretamente irá desde el puerto de pescadores hasta la zona del hotel Sur Mallorca y será de madera, piedra de Santanyí e, incluye, la plantación de árboles autóctonos.