El Departament de Carreteras, adscrito a la Conselleria d'Obres Públiques, emprenderá en breve una importante mejora del carril bici de la carretera de Can Picafort. El proyecto consistirá en desplazar el carril de las bicicletas fuera de la carretera para evitar el peligro de invasión de los coches.
En primer lugar, según explica Juan Manuel Pérez Ribas, jefe de Conservación en Carreteres, se suprimirán los bordillos que en la actualidad separan el carril para bicicletas de la carretera. La carretera se arreglará y se dotará de unos buenos arcenes. Fuera de carretera y separado por una barrera de seguridad se construirá el carril bici. «Esta obra es fundamental para proteger a los ciclistas», asegura Pérez Ribas, quien estima que la obra estará completamente finalizada para la próxima temporada estival.
En su día, la colocación de los bordillos de hormigón supuso una solución válida para separar el carril bici, de unos cuatro kilómetros, por el poco tráfico que soportaba la carretera. Hoy en día, la situación es completamente diferente. Existe un tráfico muy intenso por esta carretera eminentemente turística y los choques con los bordillos de la carretera son constantes. El peligro para los ciclistas es cada vez mayor. Estas obras serán ejecutadas por la empresa Siquier y el coste de las mismas rondará los 10 millones de pesetas.