Las preguntas formuladas por el PP durante el último pleno sobre «Ràdio Marratxí» rompieron la monotonía de la sesión y abrieron un intenso debate sobre la legalidad de la emisora. Antoni Montilla (PP), en una intervención partidista, acusó al Ajuntament de haber dado la espalda a «Ràdio Marratxí» y preguntó al batle, Miquel Bestard (Idma), si quería ser el alcalde que había contribuido a cerrar «Sa Ràdio d'aquí». El portavoz popular se preguntó si Bestard intentaba pasar factura a Antoni Company, padre del propietario de la radio y ex miembro de Independents de Marratxí (Idma), por haber fichado por el PP.
La intervención estuvo motivada por la existencia de una denuncia de la Asociación Española de Radiodifusión Comercial ante la Direcció General de Tecnologia i Comunicacions contra las «emisiones irregulares correspondientes a una emisora de radiodifusión sonora con modulación de frecuencia llamada Ràdio Marratxí» que motivó un escrito dirigió al Ajuntament para saber si las emisiones correspondían a la emisora municipal.
El Consistorio contestó que «la citada emisora no se corresponde en absoluto con ninguna de carácter municipal». Esta situación provocó el pasado sábado que los contertulios y el responsable de la emisora, Rafel Company, criticasen duramente al equipo de gobierno y especialmente el edil de Cultura, Miquel Coll.
En el pleno, Bestard rechazó las acusaciones de Montilla, a quien acusó de estar mal informado. El batle dijo que él no tiene que cerrar la emisora, pues en todo caso correspondería al Govern, que tiene una buena relación con el edil Antoni Company y que en ocasiones ha hablado con Rafel Company para intentar solucionar el conflicto legal sobre la emisora local, reseñando que debe ser ésta quien debe acudir al Ajuntament de Marratxí y no al revés.