La Conselleria de Medi Ambient estudiará la viabilidad de ampliar el Parc Natural de Mondragó e incluir en los límites de protección la zona marina del parque. A través del programa Interred que promueve la Unión Europea (UE) y que proporciona fondos para medio ambiente, la Dirección Gneral de Biodiversitat quiere estudiar jurídicamente cómo se puede se puede poner en marcha esta iniciativa.
La ampliación de la zona de influencia del parque al litoral permitiría a la Conselleria de Medi Ambient regular y limitar el fondeo en las playas de Mondragó, uno de los grandes problemas que sufre este parque en la temporada estival. Pere Tomàs, director general de Biodiversitat, explicó que además se pretende regular el uso turístico de las playas. «En este sentido, es necesario redimensionar la zona y controlar las instalaciones turísticas (hamacas y chiringuitos). Ahora cala Mondragó no da la sensación de ser un parque natural y hay que ser consciente de que se va a un parque».
Tomàs quiere que este proyecto sea una realidad en el año 2000 y también de cara a la próxima temporada turística su departamento pondrá en marcha un plan de regulación de usos recreativos y turísticos del parque para regular los accesos al parque y evitar la saturación de este año. «Intentaremos prohibir que los vehículos puedan acceder hasta las playas y que se usen los aparcamientos. También se controlará el transporte público y se procurará que los autocares de gran tamaño no circulen cada hora por la zona. No a todas horas hay un gran volumen de pasajeros».