Julián Díaz y Rodolfo Olocco, Rodi, se casarán pasado mañana en el transcurso de una ceremonia a celebrar en el Consistorio. La pareja lleva 14 años de vida común, los últimos en su chalet de una urbanización residencial, donde también vive una amiga común, Ester.
Julián tiene 35 años y es salmantino, pero lleva más de media vida en la Isla. Su compañero nació en Córdoba (Argentina) hace 45 años, pero fijó su residencia en la Isla a mitad de los 80. De las tareas domésticas, Julián prefiere la cocina y el jardín. Rodi elige el bricolage y la decoración.
La boda será oficiada este sábado por la alcaldesa, Margarita Nájera, y contará con la asistencia de los padres y hermanos de Julián, así como numerosas amistades de la pareja, entre las que figurarán 25 parejas heterosexuales que ejercerán de padrinos. El solemne acto, al que los dos novios acudirán vestidos de blanco, contará con la aportación musical del tenor Jaume Roca y el pianista Xavier Mut.
Tras la ceremonia, que los contrayentes se plantean como una fiesta «como cualquier boda», la pareja y sus invitados compartirán comida y cena, y luego emprenderán el viaje de luna de miel a la India. «Nos hace mucha ilusión», afirman.
Julián trabaja de cocinero y en el mundo del espectáculo, lo mismo que Rodi, quien agradece a su empresa que le haya otorgado los 15 días de permiso que se concede a cualquier recién casado: «Estoy muy agradecido».
Pese a la novedad que implica protagonizar la primera boda homosexual de Mallorca, ambos ven la situación con normalidad: «Jamás nos discriminaron por ser homosexuales».