Jaume Matas, que es presidente de honor de la junta local de Calvià, admitió ayer en Madrid, donde el Partido Popular celebra su XIII Congreso, que una moción de censura en el Ajuntament de Calvià «no es planteable» en estos momentos cuando faltan menos de cinco meses para las elecciones. «No tenía información respecto a este asunto (la posible moción de censura) porque llevo bastantes días fuera de Mallorca, pero creo que ha habido desinformación por parte de la gente de Calvià», manifestó Matas en el Palacio Municipal de Madrid, marco en el que el mismo viernes una representación de la dirección regional del PP balear pidió explicaciones a Pere Cantarero, presidente de la junta local de Calvià, por anunciar un hipotético acuerdo con Anselmo Martín contra la alcaldesa, Margarita Nájera.
El propio presidente regional de los populares, Joan Verger, comentó en la capital del Estado que intentará aclarar la próxima semana la situación creada con la junta local de Calvià por el anuncio de Cantarero. Verger, muy alejado de la línea política de Cantarero, no podía ocultar su malestar por lo ocurrido en Calvià, donde el anuncio de una moción de censura se hizo sin contar con la dirección nacional. «No entendería, hoy por hoy, una moción de censura, y en Calvià tampoco existe la garantía de poder ganarla», destacó el presidente regional.
El PSOE apela al pacto antitransfuguismo
La alcaldesa de Calvià y presidenta del PSIB-PSOE, Margarita
Nájera, solicitó ayer el amparo de los firmantes del pacto
antitransfuguismo firmado el 7 de julio pasado por todos los
partidos políticos para evitar así la posible presentación de una
moción de censura en el Consistorio que ella preside. La carta fue
remitida con fecha del pasado viernes a los ministros Mariano Rajoy
y Àngel Acebes; la presidenta de la Federación de Española de
Municipios y Provincias, Rita Barberà, y el nuevo secretario
general del PP, Javier Arenas; todos ellos firmantes del pacto.