El edificio Convent Centre es ilegal e ilegalizable. El inmueble fue construido originariamente para instalar una lujosa tienda de muebles, pero pasó a ser propiedad de una entidad bancaria debido a la falta de pago de sus promotores. El edificio fue adquirido poco después por el Ajuntament de Manacor con el fin de instalar en él la Casa Consistorial.
El ex alcalde Bartomeu Rosselló (PP) fue el encargado de agilizar la compra del inmueble, que, tal y como informaron los técnicos municipales en su día, se hallaba fuera de ordenación por exceso de volumen. Esta compra fue presentada a los vecinos y a los grupos de la oposición como una «ganga», según palabras del ex alcalde Rosselló, puesto que se había conseguido adquirir el inmueble por unos 80 millones de pesetas cuando su valor de mercado parecía ser muy superior.
Los grupos de la oposición ya advirtieron a Rosselló que la «ganga» podría no ser tal y se mostraron en contra de cerrar una operación que a la larga podría resultar muy costosa a las arcas municipales. «Es la tontería más grande que ha hecho el Ajuntament. Se han malgastado los dineros públicos para adquirir un edificio que por su actual configuración es ilegal e ilegalizable», ha afirmado la portavoz del PSM, Maria Antònia Vadell.