Los vecinos del Paseo Marítimo de Palma se han despertado la madrugada de este viernes a las cuatro sobresaltados por un ruido estridente que no ha dejado de sonar hasta pasadas las ocho. «No sólo no me ha dejado dormir a mi, sino que me he encontrado saliendo a trabajar a tres vecinos con el mismo mal humor que teníamos todos en mi casa. No hemos podido pegar ojo nadie», explica uno de los afectados.
Su sorpresa, al contactar con la Autoritat Portuària de Balears (APB) es que no sólo sabían de la alarma sino que le han confirmado que había sonado «intencionadamente». Se trata de un nuevo sistema de aviso a los barcos que sonará en el puerto los días de niebla. Hoy ha sido la primera vez que se ha activado.
«Hasta ahora nunca la habíamos escuchado nadie, pero dicen que cuando haya niebla la harán sonar. Hay que plantearse si está justificado infundir un estado de ansiedad por privación del sueño un día laborable a cambio de que los barcos sepan que hay niebla de forma acústica, teniendo en cuenta que los barcos los llevan capitanes y tripulación, que no sólo están provistos de ojos, sino que deben conocer las condiciones climatológicas de cada momento debido a la naturaleza de su labor. Además, por supuesto, de que en pleno 2023 hay tecnologías más precisas y menos invasivas que un pitido que despierte a un par de barrios. Que me corrijan si estoy equivocado pero en el puerto de Palma accidentes causados por la niebla creo que hay pocos», dice el vecino que prefiere mantener su anonimato.
La APB confirma que «la sirena es nueva» y que «es la primera vez que ha entrado en funcionamiento desde su instalación en el dique del Oeste». «Funciona de forma automática en el momento en que detecta niebla. Vamos a ver cómo podemos evitar que el sonido vaya a la ciudad (ahora la emisión del sonido es de 360º) para que no moleste a los vecinos, igual que hacemos con las luces de los faros», añade.
Explica la APB que «de momento hemos puesto el sistema en manual para controlar el tiempo de emisión en caso de que se produzcan nuevos episodios de niebla». Justifica la necesidad de la nueva instalación en razones de seguridad: «Igual que los faros, las sirenas son Ayudas a la Navegación y forman parte de las señales marítimas no digitales que persiguen informar a los navegantes de los peligros a los que están expuestos. Son ayudas complementarias a los otros sistemas de navegación, cuyo objetivo es salvar vidas en el mar».