Los vecinos de Nou Llevant están molestos por lo que consideran «abandono» del Ajuntament de Palma y critican la degradación de la zona por culpa de la dejación municipal y por la acción de las constructoras que, actualmente, están levantando varias promociones de viviendas de lujo en el barrio. La zona más afectada, según apuntan, es la situada en los alrededores de los parques de Son Pedrals y Can Palou donde se acumulan coches abandonados, restos de botellones, árboles tirados y destrozos de mobiliario urbano provocados por la construcción de varios edificios de alta gama.
«Las administraciones llevan años sin invertir en la conservación de la zona. Han dejado que se muera poco a poco y ahora, de repente, permiten la construcción de un par de cientos de pisos de lujo. Eso es de primero de especulación, ya hicieron lo mismo en sa Calatrava y lo harán en Pere Garau. Gobiernan a espaldas de los ciudadanos», aseguran. Un ejemplo de lo que denuncian se encuentra en la calle Bogotá donde, en apenas cien metros de distancia, se localizan ocho coches abandonados que llevan meses allí y que son utilizados como contenedores de escombros.
Los afectados confían en que la situación mejore cuando los nuevos pisos se vendan «y lleguen al barrio familias por las que sí les merecerá la pena cuidar las calles pero, mientras tanto, estamos condenados a vivir entre basura». La construcción de dichas viviendas también está afectando de forma negativa a la zona, al menos de momento, ya que el alto número de vehículos pesados que circula por esas calles está destrozando pavimentos y parterres «sin que nadie se preocupe y sin saber si cuando acaben las obras alguien se hará cargo. Deberían arreglarlo las propias constructoras pero nos tememos que saldrá del dinero de todos, de nuestros impuestos».
De hecho, señalan, algunas zonas verdes ya fueron replantadas por personal municipal poco después de comenzar las obras «porque ya las habían destrozado, pero a los pocos días ya estaba todo levantado de nuevo».