Las escaleras mecánicas de la Plaça Major están paradas desde hace unos días, lo que ha indignado a los vecinos que denuncian que supone una barrera insalvable para personas mayores o con discapacidad que se encuentran con que no pueden acceder al aparcamiento subterráneo a ir comprar al supermercado o las tiendas de las galerías.
La presidenta de la Comunidad de Propietarios de tres fincas de la plaza, Carme Vidal, reconoce que «estamos preocupados» tanto por la falta de escaleras mecánicas, una situación que «afecta a todos los ciudadanos, no solo a nosotros», como por la inseguridad y la suciedad de la zona.
El administrador de la comunidad de propietarios de las galerías de la Plaça Major, Bartolomé Castañer, admite que las escaleras han dejado de funcionar «porque no hay dinero, por falta de pago a la empresa encargada de su mantenimiento, aunque hasta ahora íbamos consiguiendo pagar los gastos ahora mismo la situación es imposible porque Cort, al dar por disuelta la comunidad de forma unilateral, ha dejado de pagar su parte». De hecho, añade que «también la persona que se encargaba de la limpieza nos ha demandado ante el TAMIB y nos tememos que las últimas nóminas no se van a poder pagar». Asegura que Cort ha contratado a una empresa de vigilancia «pero no sabemos lo que cuesta ni quién lo va a pagar».
El presidente de la comunidad de propietarios, Bernardo Feliu, confirma la «quiebra económica» y recuerda que «nosotros también somos propietarios y todos queremos lo mejor para las galerías, queremos negociar pero no nos vamos a dejar avasallar por el Ajuntament».
Para intentar dialogar, la comunidad de propietarios ha solicitado una reunión con el concejal de Participació Ciutadana i Govern Interior, Alberto Jarabo, pero el Consistorio condiciona cualquier negociación a la entrega de las llaves de acceso por parte de la comunidad de propietarios.
El edil declara que «estamos encontrando dificultades con la comunidad para que nos devuelva las llaves de acceso y saben que se arriesgan a sanciones». No obstante, resalta que «entendemos que se avendrán a razones. Antes de cualquier negociación deben devolver las llaves, si es que quieren negociar algo».
«Las llaves lo primero, luego negociaremos jurídicamente y por último, tomaremos una decisión sobre el uso de los espacios», insiste Jarabo. Añade que «hemos pedido a las empresas que mantenían las atracciones en los pasillos que se los lleven y cambiaremos la titularidad de los contadores».
Locales ocupados por Eroski
Otro de los aspectos que está en el aire y supeditado a la devolución de las llaves y la posterior negociación es la renovación del alquiler de los dos locales municipales que ocupa el Eroski que hay en las galerías de la Plaça Major. Al respecto, el concejal de Govern Interior, Alberto Jarabo, afirma que por el momento «no habrá prórroga ni negociación». El supermercado ocupa también una serie de pasillos de uso común, pero en este caso la comunidad de propietarios aprobó, en una reunión reciente a la que no asistió ningún representante municipal, renovar el permiso para la ocupación de estas zonas por parte del Eroski.
En medio de todo esto, el PI ha presentado en el Parlament una PNL para pedir que la Plaça Mayor sea considerada de interés autonómico. De aprobarse significará que el Govern balear destinará dinero a la remodelación de las galerías.