La pandemia de covid-19 generó en 2020 "importantes" reducciones de las rentas personales medias en la mayoría de los municipios españoles, con tasas de caída "muy elevadas" en las localidades más turísticas, según un estudio de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea). La estadística Renta personal de los municipios españoles y su distribución, publicada este lunes, actualiza con datos de 2019 y 2020 la base de datos de Renta personal de las 1.211 localidades de más de 5.000 habitantes, a la que se suman otras 23 más pequeñas que figuraban en los informes de años anteriores.
Para el conjunto de municipios se observa un descenso de la renta media entre 2019 y 2020 del 3,63 % por declarante y del 1,62 % por habitante y en el caso de la desigualdad con la que se distribuye la renta personal dentro de los municipios -de acuerdo con el coeficiente Gini, el método más utilizado para medir la desigualdad de los salarios- se aprecia un aumento entre ambos años del 1,52 %.
Entre las 10 ciudades más grandes de España, Madrid, Barcelona y Valencia, por este orden, ocuparon en 2019 y 2020 los tres primeros puestos en renta personal por declarante seguidas por Sevilla, Zaragoza, Málaga, Murcia, Palma, Las Palmas de Gran Canaria y Alicante. Con la excepción de Murcia, donde creció un 2,72 %, en las nueve grandes ciudades restantes consideradas, la renta media por declarante se redujo entre 2019 y 2020, con tasas de variación negativas entre el 11,85 % de Palma y el 1,32 % de Málaga.
Respecto a la desigualdad de la renta personal, medida a través del índice de Gini, aumentó en siete de esas 10 grandes ciudades, sobre todo más en Murcia (9,83 %), Sevilla (7,33 %) y Málaga (7,29 %) y se redujo en Madrid (0,15 %), Valencia (0,54 %) y Alicante (1,51 %). En 2020, Murcia, con un índice de Gini de 0,5653, adelantó a Madrid (0,5536) como la gran ciudad con mayor desigualdad en la distribución de la renta, de las diez más pobladas.
Entre las ciudades de más de 50.000 habitantes con mayor renta personal media por declarante apenas hubo cambios de 2019 a 2020, con siete municipios madrileños y tres barceloneses entre los 10 primeros. Pozuelo de Alarcón siguió un año más a la cabeza en el primer año de la pandemia, de forma muy destacada respecto al segundo, un 32 % más, que fue Boadilla del Monte, seguidos ambos por Alcobendas, Sant Cugat del Vallés, Majadahonda, Las Rozas, Castelldefels, Madrid capital, San Sebastián de los Reyes y Barcelona capital, ya con un 43,5 % de la renta de Pozuelo.
Sí hubo algunas variaciones en 2019 y 2020 entre los 10 municipios de más de 50.000 habitantes con menor renta media. En concreto, salieron de la lista Utrera y Vélez Málaga y entraron Benidorm y Arrecife, y El Ejido cedió el último lugar a Arona, mientras que el resto fueron Santa Lucía de Tirajana, Granadilla de Abona, Sanlúcar de Barrameda, Elda, Torrevieja y Lorca.