El jefe del Gobierno, Pedro Sánchez, ha expresado este lunes el respaldo pleno de España al presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, ante los sucesos provocados por «movimientos ultras» que ha calificado de «repulsivos» y que considera que son la mayor amenaza a la democracia en todo el mundo.
Sánchez ha iniciado su intervención en la apertura de la VII Conferencia de Embajadores refiriéndose a la situación provocada en Brasil por miles de partidarios del expresidente Jair Bolsonaro que tomaron durante varias horas las principales instituciones del país. El jefe del Ejecutivo, en la sede del Ministerio de Asuntos Exteriores y acompañado por el titular de este departamento, José Manuel Albares, ha trasladado el apoyo del Gobierno y de toda la sociedad española al presidente electo brasileño y a las instituciones democráticas del país.
Para Sánchez, los hechos de Brasil recuerdan que la mayor amenaza que tienen la democracia, la paz y la prosperidad en el mundo es el resurgir de movimiento ultras «dispuestos a arrollar con todo». «Los métodos los conocemos y se repiten milimétricamente en todos y cada uno de los países que los sufren», ha subrayado para enumerarlos después. Primero, el uso sistemático de la mentira para captar seguidores, luego el recurso al insulto y a la violencia verbal «para envenenar la convivencia en la sociedad y exaltar a sus seguidores» y, finalmente, un ataque a las instituciones y a la legalidad.
Todo eso, ha dicho, que se vio en Estados Unidos, ahora en Brasil y se comprueba a diario en diversas latitudes. Frente a ello, ha subrayado que la acción exterior de España debe sustentarse en los valores que recoge la Constitución, valores que ha recalcado que están en las antípodas de un fenómeno que ha calificado de repulsivo y que ha considerado que es la primera amenaza actual.