El Ministerio de Sanidad está analizando la recomendación que la Comisión Europea ha hecho a los Estados miembros de la UE de aislar aquellos territorios que registren una incidencia acumulada de más de 500 casos de coronavirus por cada 100.000 habitantes en los últimos 14 días.
Así lo ha indicado el ministro de Sanidad, Salvador Illa, en rueda de prensa en el Palacio de la Moncloa tras participar en su último Consejo de Ministros antes de dejar el cargo para centrarse en su candidatura a las elecciones en Cataluña.
El Ministerio «está analizando la recomendación» europea, que previsiblemente se tratará el próximo jueves con las comunidades autónomas en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, según ha avanzado. En cualquier caso, ha señalado que ya hay muchas comunidades autónomas y territorios con una incidencia de 500 o inferior que «ya tienen decretados confinamientos».
La Comisión Europea ha planteado crear una cuarta categoría en el mapeo de las zonas de riesgo en la UE para colorear de rojo oscuro aquellas en donde la tasa de contagio supera los 500 casos por cada 100.000 habitantes, algo que está por consensuar con los Estados miembros pero que supondrá que la mayor parte de España pase estar clasificada en esa nueva gama de «muy alto riesgo». El Ejecutivo comunitario cree que no debería producirse ningún desplazamiento innecesario desde o hacia estas regiones.
Illa ha admitido que la situación de la pandemia en España es «preocupante» porque la incidencia acumulada a 14 días sigue siendo alta. Sin embargo, ha destacado que aquellas comunidades autónomas que han aplicado medidas con más prontitud para frenar la transmisión del virus ya «han empezado el descenso de la curva» de contagios.
Confinamiento domiciliario
Según ha explicado, esas siete comunidades han conseguido resultados usando los instrumentos que tienen a su disposición gracias al estado de alarma decretado el pasado octubre para un periodo de seis meses. Un marco jurídico que, según ha apuntado el ministro, se aprobó «previendo que habría altos y bajos en la evolución de la pandemia incluso coexistiendo con el proceso de vacunación».
Illa ha argumentado que con los instrumentos ordinarios de los que disponen los gobiernos autonómicos en materia de sanidad y salud pública más las herramientas que les proporciona el estado de alarma, como los toques de queda o las limitaciones al derecho de reunión, «se doblegó la segunda curva» de la pandemia y «se va a acabar doblegando la tercera en todas partes».
Por ello, y teniendo en cuenta también que en España ya hay más de un millón de personas que han recibido la vacuna contra el Covid-19, considera que «no hace falta en estos momentos un confinamiento domiciliario».
Además, ha afirmado que otros países europeos que dicen haber confinado a su población están aplicando en realidad «medidas similares, por no decir las mismas», que las que ya están vigentes en algunas comunidades autónomas que han desplegado «todo el potencial» de las medidas restrictivas que tienen a su alcance.