El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha revelado que la Consellería de Salut catalana anunciará este mismo viernes «más medidas» para contener los brotes en la comarca del Segrià (Lleida) y en L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona).
En una entrevista en Onda Cero, el titular de Sanidad ha recordado que en sendos territorios existe una «transmisión comunitaria que hay que poner bajo control». En esa línea, la consellera de Salut del Govern, Alba Vergés, estuvo reunida con su equipo «hasta ultimísima hora para perfilar las medidas».
Illa, que ha descartado adelantar el anuncio de la propia Vergés, ha señalado que no le consta que en ese encuentro se estuviera «pensando en un escenario de confinamiento domiciliario» para tratar de para la expansión del virus después de que Cataluña sumase este jueves 1.293 nuevos casos.
La peor parte se la lleva el área sanitaria de Lleida, que mantiene 50 focos de COVID-19 entre brotes y agrupaciones de casos y advierten que la velocidad de contagio comunitario en esta provincia es muy elevado. En la comarca del Segrià se han registrado 178 nuevos casos en las últimas 24 horas, mientras que en Hospitalet de Llobregat -zona también muy afectada-, se han contabilizado 123 respecto al balance anterior.
En esta línea, el ministro ha admitido que el Gobierno tiene un grado de preocupación «un poco superior» desde que se alcanzó la 'nueva normalidad'. «Nunca hemos dejado de estar preocupados. Hay que evitar la conclusión que algunos ciudadanos han tenido: el fin del estado de alarma no significa que se haya acabado el virus», ha apuntado.
Respecto a la situación de Zaragoza, que se encuentra en Fase 2 flexibilizada ante el aumento de casos, Illa ha señalado que las medidas que se tomaron este jueves «son las adecuadas» a juicio de los técnicos del Ministerio.
«Creo que son las adecuadas para ponerlo bajo control. Habrá que esperar unos días y, si son insuficientes, habrá que corregirlas bajo la dirección que convenga», ha señalado, después de que el gobierno aragonés anunciase «refuerzos» en las entradas y salidas de la capital y pidiese limitar los movimientos a los ciudadanos.
A nivel nacional, el ministro ha asegurado que la mayoría de los 150 brotes de COVID-19 que actualmente hay activos en España están «controlados», si bien ha reconocido que le preocupan especialmente los que se están produciendo en Aragón y en Cataluña.
Por último, Illa ha apelado a la «responsabilidad de la ciudadanía» y ha puesto de ejemplo a los aficionados del Real Madrid como ejemplo de comportamiento «exquisito» para evitar la aparición de nuevos casos. En concreto, se ha referido a la ausencia de seguidores merengues en las inmediaciones de Cibeles después de que los blancos se alzasen con la Liga.
«Un titulo de liga es un acontecimiento que hay que expresar con alegría. Es compatible celebrar y tener conciencia de que hay un virus», ha señalado, para después advertir sobre el peligro de las concentraciones masivas. «Si vamos por este camino, y la gente es consciente de que tiene que ir con cuidado... no hará falta que se tomen medidas más drásticas», ha zanjado.