El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, preside este domingo una nueva reunión por videoconferencia con los presidentes de las comunidades y ciudades autónomas, la primera tras la polémica suscitada en algunos territorios por la decisión del Ejecutivo de rechazar su paso a la fase 1 del plan de desescalada.
En concreto, podrán pasar a la fase 1, que aligera las restricciones a la movilidad y a la actividad con respecto a la fase 0, el territorio completo de Galicia, Asturias, Cantabria, País Vasco, La Rioja, Navarra, Aragón, Extremadura y Murcia, así como de Canarias y Baleares, donde se suman todas las islas a las que ya estaban en fase 1 en ambos archipiélagos, y las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla.
Madrid, Cataluña y Castilla y León, con pequeñas excepciones en sus territorios, seguirán en la fase 0 o de preparación, en la que también permanecerán de momento las provincias castellanomanchegas de Toledo, Ciudad Real y Albacete, las andaluzas de Málaga y Granada y 14 de los 24 departamentos sanitarios de la Comunidad Valenciana.
Es en este último grupo de las zonas que todavía deberán aguardar, al menos, una semana más para lograr ese cambio de fase donde se han sucedido las quejas.
En el caso de Madrid, su vicepresidente regional, Ignacio Aguado, advirtió el sábado de que esta decisión por parte del Gobierno central supone que muchos negocios todavía no podrán abrir, algo que ahondará en la situación tan crítica que atraviesan miles de autónomos, bares y pequeños comercios.
Aguado ha considerado, además, que el Ejecutivo debería hacer obligatorio el uso de mascarillas a partir de este lunes.
La consejera de Sanidad del gobierno valenciano, Ana Barceló, ha manifestado también que no comparte que la Comunidad Valenciana no pase íntegramente a la fase 1; y desde Andalucía, el vicepresidente del gobierno regional, Juan Marín, aseguraba que dejar a Granada y Málaga en la fase 0 supone «un ataque frontal» a la Junta.
En este sentido, el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, evitó este mismo sábado en una rueda de prensa entrar en polémicas con ningún presidente autonómico y subrayó que todos ellos encontrarán en él un «aliado» frente al coronavirus.