La Comisaría General de Policía Judicial en Madrid investiga las razones por las que una talla barroca de Santa Margarita de Cortona, atribuida al escultor José de Mora y perteneciente al Convento de Los Ángeles de Granada, iba a ser subastada en Nueva York (Estados Unidos).
Según ha asegurado la subdelegada de Gobierno en Granada, Inmaculada López Calahorro, la Policía Nacional en la provincia va a tomar declaración a las propietarias de esta pieza eclesiástica, en este caso a las monjas del convento granadino.
«En eso se trabaja actualmente, para detectar cuáles fueron las circunstancias que han llevado a que la figura llegara a subastarse», ha asegurado López Calahorro.
La talla barroca pertenecería a la galería madrileña Nicolás Cortés, que la habría comprado a un anticuario en 2018. En caso de confirmarse que la figura es la procedente del convento granadino, se anularía la venta y esta regresaría a sus legítimas dueñas.
La figura de la virgen había viajado a Nueva York y ya habría sido incautada, según medios locales de Granada, a su vuelta a España, después de que el Ministerio de Cultura advirtiese a la Brigada de Patrimonio Histórico de la Policía Nacional de la publicación de informaciones sobre una supuesta venta de esta obra.
A través de la investigación que se encuentra abierta en la Comisaría General de Policía Judicial madrileña, que detectó el posible fraude, se trabaja actualmente para conocer las circunstancias que han llevado a que esta pieza, de alto valor patrimonial y eclesiástico, llegara a estar a la venta.
Fueron varios vecinos de la Asociación de Vecinos del Realejo quienes denunciaron en primera instancia que la estatua de Santa Margarita de Cortona, que habría sido realizada por el escultor granadino José de Mora, había sido puesta a la venta en Nueva York a través de una galería de arte madrileña.
Por su parte, el grupo municipal Podemos-IU en el Ayuntamiento de Granada pidió este martes «con carácter de urgencia» que la Junta de Andalucía amplíe la declaración de Bien de Interés Cultural (BIC) a las obras de arte que se encuentran en el interior de los conventos de Granada, con el objetivo de evitar que los edificios religiosos sean expoliados tras su cierre y que su vasto patrimonio salga fuera de la ciudad.
El concejal Francisco Puentedura instó al Gobierno municipal a convocar de «forma inminente» las mesas de coordinación del Plan Centro y Albaicín y que el Ayuntamiento se coordine con la Junta de Andalucía para aplicar la Ley de Patrimonio y que de este modo se abra un expediente de bien de interés cultural que «incluya el contenido y no sólo el continente» de los cenobios granadinos en la misma declaración BIC para que sus obras de arte no puedan ser separadas.
«Las obras de arte que hay en los conventos de Granada son de carácter público, forman parte de un legado histórico de donaciones hechas por granadinos y granadinas a lo largo de los siglos y es de un incalculable valor artístico y cultural», subrayó Puentedura.