Adolfo Domínguez perdió en su último ejercicio fiscal (cerrado en febrero) 6,9 millones de euros, con lo que recortó sus números rojos el 70 % respecto al año anterior, ha informado este miércoles el grupo, que ha decidido eliminar de su oferta las enseñas U (público juvenil) y AD+ (tallas grandes).
La compañía fundada por el diseñador gallego del mismo nombre, facturó 113,7 millones de euros, el 3,1 % más a pesar de contar con 39 puntos de venta menos, y generó un resultado bruto operativo (ebitda) negativo de 2,1 millones de euros, lo que supone una mejora del 75 % respecto al ejercicio anterior.
Las ventas comparables (descontadas nuevas aperturas, cierres y reformas) repuntaron el 7,3 % y la facturación a través de internet creció el 22,3 %, según la compañía, que ha destacado que logró incrementar su cifra de negocio por segundo año consecutivo.
En un comunicado, la empresa ha explicado que ha puesto en marcha un plan para «fusionar» todas sus marcas con el objetivo de centrar todo su diseño, negocio y red de tiendas en su marca principal: Adolfo Domínguez.
En el plazo de cinco meses, el proceso habrá concluido con la transformación de aproximadamente 115 tiendas de sus submarcas U y AD+ en tiendas Adolfo Domínguez.
Dicho plan generará importantes sinergias para la compañía en los procesos de diseño, logística y red de tiendas, añade la fuente, que asegura que la fusión de las tres enseñas en una sola «está directamente orientada a mejorar la oferta al cliente, tanto en el producto como en la percepción de la marca».
Al cierre de febrero, la firma contaba con 472 puntos de venta en 29 países.
«Tras el proceso de fusión de marcas, la compañía situará su red en el entorno de las 416 tiendas Adolfo Domínguez. La cifra final de puntos de venta en 2018 se completará con las aperturas realizadas y previstas durante este año. El peso de la red internacional superará el 50 %», según la compañía.
Unos resultados que permiten «estar satisfechos» tras conseguir reducir las pérdidas gracias a «las mejoras introducidas», ha apuntado el director de Operaciones, Antonio Puente, en una rueda de prensa celebrada esta mañana, junto con el director financiero, Modesto Lusquiños; la directora comercial, Dora Casal; y la directora de control de gestión, María Pérez.
Entre las cifras que maneja la compañía, este responsable ha destacado el incremento por segundo año consecutivo en las ventas en un 3,1 %, algo que «no pasaba en los últimos diez años», todo ello, pese a tener «39 puntos de venta menos», logrando vender por tienda un 12 % más que el año anterior, fruto de los cambios internos habidos dentro de la compañía.
«La compañía no tiene deuda bancaria y hemos conseguido aumentar la tesorería en 700.000 euros; no sólo es la mejora en la cuenta de resultados sino en la salud financiera"; ha dicho el director de operaciones, quien prevé que la firma textil pueda revertir en poco tiempo los resultados del ebitda.
Preguntada por el plan de fusión de marcas para centrar todo su diseño, negocio y red de tiendas en la marca principal (Adolfo Domínguez) de tal forma que se suprimen las marcas U y AD+, Casal ha asegurado que se trata de una decisión «estratégica» para «concentrar» las colecciones.
En todo caso, ha descartado que esto vaya a conllevar una eliminación de muchas tiendas salvo donde haya «duplicidades» al aclarar que lo que se hará es «concentrar» colecciones en una tienda y que se complementará con la apertura de nuevas tiendas. Una vez concluida la fusión, está previsto que AD pase de los 472 puntos de venta que tiene al término de 28 de febrero a «en torno a 416 tiendas bajo la marca Adolfo Domínguez».
Paralelamente, ha confirmado la apertura de nuevas tiendas en otros mercados como Oriente Próximo, México, Catar y prevén abrir la primera tienda en Rusia y Sídney (Australia) en junio a lo que les seguirá la apertura de una segunda tienda en estos dos últimos países.
«Todos los parámetros indican que estamos en el buen camino», ha abundado Lusquiños, quien ve indicios positivos para salir de los datos negativos, dado que ya son más «sólidos» financieramente y generan «caja».
Respecto al empleo tras el cierre de tiendas, Puente ha confirmado que buscarán la «reubicación menos traumática» tras confirmar una «pequeña reducción» en la plantilla, que ha pasado de 1.400 a 1.300 este año.
En cuanto a la inversión prevista, la compañía prevé destinar en torno a un millón de euros para la reconversión de las tiendas pero en la línea de otros años.