La Audiencia Nacional ha condenado a 34 años de prisión a Mikel Mirena Otegi por el asesinato en 1995 de los ertzainas Iñaki Mendiluze y José Luis González en la localidad guipuzcoana de Itsasondo. El tribunal presidido por el juez Fernando Grande-Marlaska le considera culpable de la comisión de dos delitos de asesinato terrorista en concurso con uno de atentado.
El tribunal le ha absuelto, no obstante de la comisión de delitos de pertenencia a organización terrorista, amenazas y coacciones y le ha aplicado la atenuante de consumo excesivo de alcohol. La Fiscalía solicitaba en su contra un total de 70 años.
Otegi ya fue juzgado y absuelto por estos hechos en 1997 por un jurado popular de la Audiencia Provincial de Guipúzcoa. No obstante, el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) ordenó repetir el juicio con una decisión que fue avalada por el Tribunal Constitucional en 2004.