El Gobierno prevé reducir el número de asignaturas y vías formativas y aumentar las horas de las materias instrumentales -matemáticas, lengua, ciencias e idiomas-, tanto en Educación Secundaria Obligatoria (ESO) como en Bachillerato.
Este es uno de los puntos del informe sobre la futura Ley Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa que el ministro de Educación, José Ignacio Wert, presentó ayer al Consejo de Ministros.
La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, explicó, en la rueda de prensa posterior, que la reforma de la enseñanza tiene como objetivo mejorar la calidad educativa, acabar con el fracaso y el abandono escolares y aumentar las posibilidades de empleo, para lo que se buscará la «complicidad» del sector y el «acuerdo» de todas las fuerzas políticas.
Cualificación profesional
El documento prevé que se cursen, a partir de segundo de la ESO, programas de mejora del aprendizaje y del rendimiento académico, así como de cualificación profesional, según el Ministerio de Educación.
El Gobierno quiere adelantar a tercero de la ESO la elección de «itinerarios» mediante materias optativas y «convertir» el cuarto y último en un curso de «iniciación» con dos trayectorias «bien diferenciadas»: hacia Bachillerato o hacia Formación Profesional.
El ministro de Educación, José Ignacio Wert, señaló que la posibilidad de elegir alguna materia optativa en tercero de ESO orientada a estudios académicos o profesionales no será determinante en cuanto al recorrido posterior del alumno.
Rechazó que se vaya a dirigir a los estudiantes hacia unos itinerarios u otros en función de las notas, y se procurará que los elijan ellos mismos con sus familias según sus aptitudes.