Las entidades españolas que necesiten ayuda pública para cumplir con los nuevos requisitos de capital que exige el Gobierno tendrán tres meses para convertirse en bancos, mientras que aquellas que prevén salir a Bolsa contarán con un plazo de 13 meses, seis más de lo que estaba previsto, hasta marzo de 2012.
Las entidades que quieran pedir la ampliación del plazo para salir a bolsa deberán presentar al menos un acuerdo de su Junta o Asamblea, un calendario detallado del proceso y deberán haber otorgado a una o varias entidades el mandato para dirigir las operaciones.
Así se pone de manifiesto en el real decreto ley aprobado ayer por el Consejo de Ministros que exige a las entidades cotizadas un capital principal del 8 o del 10%, en el caso de las aquellas que no coticen, que superen el 20 % de financiación mayorista y no hayan colocado al menos un 20 % de sus acciones entre terceros.
Despejar dudas
El secretario general de la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA), José Antonio Olvarrieta, dijo que la nueva norma contribuirá a «despejar» todas las dudas generadas sobre el sistema financiero y consideró «positivo» que esta regulación no altere el nuevo modelo corporativo de estas entidades. Agregó que aunque esta regulación no recoge todas las aspiraciones de las cajas, «la CECA comprende y comparte el interés del Gobierno por conseguir una mayor transparencia hacia los mercados».
Por su parte, un portavoz de la Asociación Española de Banca (AEB) aseguró que los bancos han ofrecido al Gobierno su «colaboración activa» en todo el proceso de reforma financiera, por lo que apoyan cualquier iniciativa que implique profundizar en la reestructuración y que los bancos «cumplen o están en perfectas condiciones de cumplir los requisitos de capital establecidos».
También recordó que «han mostrado siempre su intención de no interferir en el proceso de diálogo entre las cajas y las autoridades ni en las decisiones que se adopten en su reestructuración», a la vez que considera «deseable» que este proceso se lleve a cabo por el Gobierno y el Banco de España en colaboración con las propias cajas.
Según se indica en el texto aprobado ayer, los instrumentos que se incluyen en el capital principal serán el capital, las reservas, las primas de emisión, los ajustes positivos por valoración, los intereses minoritarios y, adicionalmente, los instrumentos obligatoriamente convertibles en acciones antes de 2014. Estos requerimientos entrarán en vigor el 10 de marzo, fecha en la que el Banco de España comunicará a las entidades su situación y las necesidades de capital.
Aquellas que el 10 de marzo no alcancen el nivel requerido, tendrán 15 días para comunicar al supervisor su estrategia, que deberá incluir la forma en la que se captarán los recursos de terceros y la salida a bolsa de las entidades.
Rectificaciones
Tras la aprobación de la norma, el presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy, dijo que lo que más le preocupa de las normas del Ejecutivo es que «no van a facilitar que haya crédito en España», al tiempo que denunció las constantes «rectificaciones» del Gobierno.
El portavoz económico de CiU en el Congreso, Josep Sánchez Llibre, aseguró que la norma aportará «más credibilidad y solvencia» al sistema financiero.