El secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, destacó ayer la «victoria clara» del PSOE en las elecciones y subrayó que, con ella, los españoles «han decidido abrir una nueva etapa sin crispación».
Zapatero compareció minutos antes de las 23.00 horas ante cientos de militantes y simpatizantes socialistas que se congregaron a las puertas de la sede federal del PSOE para celebrar la victoria, y junto a él se encontraban su esposa, Sonsoles Espinosa, y gran número de miembros de la Ejecutiva del partido.
El presidente dedicó sus primeras palabras a recordar a las víctimas del terrorismo, entre ellas el ex edil socialista Isaías Carrasco, asesinado el pasado viernes, así como a los dos fallecidos en el atentado de Barajas, a los dos guardias civiles tiroteados en Francia y al resto de víctimas del terrorismo. «Ellos viven en nuestra memoria», afirmó. Acto seguido, Zapatero subrayó que la alta participación «es un motivo de alegría para todos», y felicitó a Manuel Chaves por la victoria socialista en las elecciones autonómicas de Andalucía.
El presidente garantizó que gobernará «profundizando en las cosas que hemos hecho bien y corrigiendo los errores», y dando prioridad al «diálogo social y político». «No ahorraré esfuerzos para lograr el apoyo social y político más amplio posible, y para asegurar la colaboración entre todas las administraciones», destacó, antes de garantizar que gobernará «para todos, pero pensando antes que nadie en los que no tienen de todo».
Se dirigió a aquellos que en 2004, cuando ganó por primera vez, le pidieron que no les fallara, comentario que -ha dicho- «no he olvidado ni un sólo día, y me he esforzado por estar a la altura de vuestra exigencia». «He sentido vuestro apoyo aún más en esta campaña y, en especial, en esta jornada; habéis trabajado duro, hemos trabajado duro, ha merecido la pena», afirmó.