El PP amenazó ayer con poner fin a su colaboración con el Gobierno, salvo en materia de lucha antiterrorista si antes el Ejecutivo no rectifica de manera «institucional y pública» la acusación del ministro de Exteriores sobre el supuesto apoyo de Aznar al golpe en Venezuela.
El PSOE expresó su apoyo a Miguel Àngel Moratinos y advirtió estar dispuesto a «llegar hasta el final» para demostrar que sus afirmaciones sobre el supuesto apoyo del Gobierno de Aznar al golpe de Estado en Venezuela tienen «motivos fundados», si el PP insiste en seguir atacando a Moratinos.
Ante esta advertencia, el secretario general del PP, Àngel Acebes, anunció que -si el Ejecutivo no rectifica de manera «institucional y pública» la acusación- su partido limitará la colaboración con el Gobierno al Pacto Antiterrorista y «a la necesaria para el normal funcionamiento de las instituciones».
«No haremos nada que perjudique a España ni a los españoles; defenderemos el interés general pero desde nuestras propias posiciones y tomando nuestras propias decisiones», subrayó Àngel Acebes.
Las consecuencias prácticas son que se acabaría el diálogo al margen de las instituciones (lo que afectaría al reglamento de inmigración o el del Congreso) y que no se pondría de acuerdo para hacer campaña en favor del 'sí' en el referéndum de la Constitución europea.Recordó que su partido ha presentado una solicitud de comparecencia de Zapatero en el Parlamento, por ser «el máximo responsable de esta crisis» y de la «catastrófica» política internacional de su Gobierno. Además, reiteró que el Ejecutivo «debería cesar» a Moratinos por «insultar al Gobierno del PP» y por «su acreditada incapacidad que perjudica gravemente los intereses de España».
El PP también ha presentado una interpelación a Moratinos para que se someta al control del Parlamento y explique «la retórica populista y la clara radicalización ideológica» de la política exterior.
En respuesta a estas iniciativas y advertencias, el secretario de Relaciones Institucionales y Política Autonómica del PSOE, Alfonso Perales, afirmó que su partido no ha contado «jamás» con una «colaboración leal» por parte del PP y consideró «irresponsable» que «rompan relaciones» a causa de una «refriega política».
En opinión de Perales, el PP «tiene la obligación ineludible de abandonar la estrategia de la crispación», que es una «herencia» del ex presidente José María Aznar quien, a su juicio, «los tiene esclavizados en una estrategia impropia de un partido democrático de la UE».