La policía francesa ha detenido a dos presuntos etarras que supuestamente formaban parte del aparato logístico de la banda terrorista y que tenían la intención de entregar ayer mismo el material explosivo y el armamento que les ha sido incautado, con el objetivo de perpetrar atentados en España.
Ibon Elorrieta Sanz y Luis Enrique Gárate Galarza, identidades confirmadas con el cotejo de las huellas dactilares, fueron arrestados la noche del lunes en el suroeste francés mientras circulaban en una furgoneta robada en la que transportaban abundante material explosivo y armas.
Los dos presuntos etarras trataron de eludir un control de aduanas en Oriolles, cerca de la localidad gala de Cognac, donde fueron detenidos con documentación falsa y armados.
El presidente del Gobierno, José María Aznar, se refirió a estas detenciones, que calificó de «un golpe muy fuerte» a la banda, al tratarse de la detención de personas «muy peligrosas», a las que se les ha incautado «muchísimo material que iba a ser entregado hoy mismo (por ayer) para cometer asesinatos y atentados en España».
Fuentes de la lucha antiterrorista dijeron que los terroristas portaban en el momento de la detención 32 kilogramos de amonal, seis de pólvora, varias granadas, nueve detonadores, una ametralladora, dos tubos lanzagranadas, cuatro cajas de cartuchos y dos pistolas.
Otras fuentes próximas a la investigación señalaron que los dos hombres, que dijeron pertenecer a ETA, no se resistieron cuando finalmente la patrulla móvil de aduanas consiguió alcanzarlos después de una persecución en coche.