Ya se conoce la identidad del segundo etarra muerto en Bilbao la noche del lunes, cuando transportaban en un coche explosivos que iban a utilizar en un atentado. Se trata de Egoitz Gurrutxaga, que había sido condenado a cinco años de prisión por su colaboración con el 'comando Donosti' de ETA. La llamada de un familiar puso a los investigadores en la pista de su identidad. Según fuentes de la investigación, un familiar de Egotiz Gurrutxaga se dirigió telefónicamente al Departamento que dirige Javier Balza para informar de la posibilidad de que éste fuera el segundo terrorista fallecido en la explosión del lunes, tal y como confirmaron posteriores investigaciones.
Su cuerpo permanece todavía en el Instituto Anatómico Forense del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco. Junto a él se encontraba Odei Gallarraga, cuya identificación se produjo este martes. Ambos murieron en el acto. Egoitz Gurrutxaga tenía 28 años de edad, nació en la localidad guipuzcoana de Rentería y ya tenía cierto historial de relación con la banda terrorista ETA. En octubre del año 2000, fue condenado a cinco años de prisión por colaboración con el 'comando Donosti', y ya entonces se encontraba en libertad provisional, una situación que todavía tenía en el momento de su muerte.
Su detención se produjo el 11 de marzo de 1999, días después de que fuera capturado en París José Javier Arizkuren Ruiz, 'Kantauri', jefe de los comandos de ETA. Esta operación desencadenó la detención de miembros y colaboradores del Donosti entre los que se encontraba Gurrutxaga. Tras ser juzgado, la juez Teresa Palacios decretó prisión incondicional. Durante su estancia en prisión, fue trasladado al centro de Martutene, en San Sebastián, para que pudiera acudir al funeral de su abuela.