El presidente del Gobierno, José María Aznar, pidió ayer a los sindicatos que «no amenacen» a la sociedad convocando una huelga general «por capricho» y les pidió que, «por favor, recuperen las actitudes «dialogantes y razonables» que han permitido el crecimiento económico de España.
«Jorobar y hacer daño a España». Ésa es en opinión del presidente del Gobierno la intención de los sindicatos al convocar la huelga general. Aznar se refirió ayer a los convocantes y les dijo que no se saldrán con la suya porque no retirará el proyecto de reforma de desempleo por el que protestan. Además, llamó «absurdo» al líder socialista José Luis Rodríguez Zapatero por respaldar la convocatoria de huelga y anunciar, al mismo tiempo, que tanto él como sus cargos trabajarán el próximo 20 de junio.
Al tiempo, y en referencia al presidente autonómico José Bono, alegó que «alguien muy conocido en Castilla-La Mancha afirmó una vez "en 1988, en declaraciones a un medio de comunicación" que una huelga se convoca en una situación límite», de lo que deduce que la intención de los sindicatos es llevar «al límite» al país con la huelga general. «Esta huelga es una barbaridad», sentenció.
Estas declaraciones fueron realizadas durante el acto de
presentación de Adolfo
Suárez Illana como candidato a la presidencia de Castilla-La
Mancha.