El presidente del Gobierno, José María Aznar, aseguró ayer en la firma del acuerdo para la mejora y el desarrollo del sistema de protección social firmado en el Palacio de la Moncloa que el Ejecutivo no se alegra de la ausencia de nadie, pero tampoco comprende los motivos de ninguna ausencia, en referencia a la retirada de UGT de la firma del pacto que sí han suscrito el Gobierno, CEOE y CEPYME y CC OO.
El sindicato firmante asegura que el pacto está en la línea de las peticiones de las centrales, ya que conseguirá un sistema más sólido y eficiente para España. Aunque aún se desconoce el coste total del acuerdo, el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Juan Carlos Aparicio, adelantó que la subida que se refiere a pensiones de viudedad y orfandad podría situarse en el entorno de los 100.000 millones de pesetas.
El salón de tapices del Palacio de la Moncloa ha sido el escenario elegido por el presidente del Gobierno para firmar el citado acuerdo junto al presidente de CEOE, José María Cuevas; el presidente de CEPYME, Antonio Masa, y el secretario general de CC OO, José María Fidalgo. Esta vez ha faltado en la foto UGT, que decidió la semana pasada no suscribirlo. Se trata de la primera quiebra entre CC OO y UGT desde hace 13 años.
Aún así, Aznar ha reiterado que el Gobierno mantiene las puertas abiertas para todos los que se puedan sumar a este esfuerzo para mejorar y profundizar en el sistema de protección social. El presidente aseguró que la firma no es fruto de la casualidad ni de la coyuntura, sino de un trabajo «concienzudo y de profunda convicción» logrado después de 9 meses de esfuerzos negociadores, de conversaciones y de impulsos.
En su opinión este acuerdo consolida y reafirma el diálogo social que profundiza las recomendaciones del Pacto de Toledo y el Acuerdo Social de octubre de 1996 «impulsando claramente la modernización, el desarrollo y la sostenibilidad de nuestro sistema de protección social». Aznar aseguró que el acuerdo garantiza el futuro del sistema de protección porque culmina el proceso de separación de fuentes y aumenta la dotación del Fondo de Reserva de la Seguridad Social.