El presidente del PNV, Xabier Arzalluz, denunció ayer el «afán tremendo» del Ministerio del Interior porque ETA vuelva a actuar. A su juicio, Jaime Mayor Oreja estaría «encantado de que exploten» los 900 kilos de dinamita interceptados por la Guardia Civil. Arzalluz aseguró que ni el hallazgo del camión con la dinamita, ni los seguimientos a políticos como el presidente del Parlamento vasco, Juan María Atutxa, son para su partido hechos «comprobables» de que su autoría sea de ETA.
«Yo no soy Rappel. Por tanto, si el camión y la dinamita es de ETA o no, eso lo veremos, si realmente han estado investigando a Atutxa o no, lo veremos. Lo que aseguro es que ni lo uno ni lo otro es para nosotros algo comprobable y lo que vemos es un afán tremendo de que todas estas cosas sucedan por alguna parte», criticó.
El dirigente nacionalista,señaló que el trabajo de la Polícia es evitar que haya atentados, mientras que el de los políticos es arbitrar también otras soluciones, y añadió que para él está vigente el principio de que «con ETA no se termina sólo policialmente». «Por tanto, sobre ese supuesto trabajamos y no me confunda con Mayor Oreja, que es el que está encantado de que todsas esas dinamitas exploten», apuntó.
Dijo no saber cuáles pueden ser las intenciones de la banda armada, ya que, a su juicio, es «autista», «puede lo que puede» y «actuará según sus criterios sin esperar a la convenciencia electoral de unos o a la desconveniencia de otros, como lo ha hecho hasta ahora». «Lo que no sé es qué hara, pero lo que me parece absolutamente desaforado y mal intencionado es decir las cosas que se están diciendo, que las están diciendo con intención e intento de rentabilidad electoral», insistió.