El presidente del Gobierno, José María Aznar, pidió ayer al lehendakari, Juan José Ibarretxe, que asuma su responsabilidad institucional en la gestión de la nueva situación tras el anuncio de ETA de suspender la tregua. Por su parte, Ibarretxe, transmitió a Aznar, Almunia, y Anguita el mensaje de que la situación «en la que nos encontrábamos de tregua no puede volver atrás».
El lehendakari se reunió en Madrid con Julio Anguita, a las cuatro y media de la tarde, después, a las seis se entrevistó con José María Aznar, y cerró su apretada agenda con un encunetro con Joaquín Almunia.
En la reunión que mantuvo en La Moncloa con el presidente del Gobierno, que duró más de hora y media, Aznar le pidió al lehendakari que asuma sus responsabilidades institucionales en la gestión de la ruptura de la tregua por parte de ETA.
Además, se mostró partidario de las movilizaciones anunciadas por Ibarretxe en contra del fin de la tregua, siempre y cuando estas concentraciones sean unitarias y reúnan las características de las que se produjeron en Ermua.
Sin embargo, y según fuentes gubernamentales, Aznar no ha pedido al lehendakari, directamente, que convoque el Pacto de Ajuria Enea, solicitud que ya ha realizado en el País Vasco el PP y que no entra, de momento, en la agenda de la Lehendakaritza.
Lo que sí le propuso el lehendakari al presidente del Gobierno fue la convocatoria de una nueva mesa que supere los foros de Estella y de Ajuria Enea, en la que estén incluidos todos los partidos, opción rechazada en el pasado por el Ejecutivo mientras que EH no haga una condena expresa de la violencia.