El Consell Nacional de CDC pidió ayer a los dirigentes del partido que hagan el máximo esfuerzo para alcanzar un pacto político con ERC, y el presidente del partido, Jordi Pujol, se ha comprometido a negociar en persona este acuerdo, aunque ha advertido que podría resultar inviable.
Pujol abrió la reunión del máximo órgano de dirección de Convergència con un informe sobre el resultado de las elecciones y las negociaciones para la elección de la Mesa del Parlamento regional, que finalmente se pactó con el PP, así como sobre las perspectivas de las conversaciones para su propia investidura como presidente de la Generalitat, el próximo 15 de noviembre.
Los miembros del Consell se encontraron a la entrada del hotel donde se celebraba la reunión con una pancarta de las juventudes del partido en la que se leía «A CiU y a ERC: ¡Queremos pacto nacionalista!».
En su intervención, Pujol se declaró partidario de esta opción, según han explicado miembros del Consell, y ha prometido hacer lo posible para conseguir el apoyo de ERC a su investidura en la sesión que comenzará el próximo día 15, aunque no concretó el alcance de este pacto ni si ofrecerá a ERC entrar en el gobierno o sólo un acuerdo parlamentario para la legislatura.
Pujol tomará personalmente las riendas de la negociación para su investidura y esta semana propondrá un encuentro personal con el secretario general de ERC, Josep Lluís Carod-Rovira, tal como éste había reclamado la semana pasada, cuando tuvo que negociar con los dirigentes de CiU Pere Esteve y Josep Antoni Duran Lleida.
Jordi Pujol advirtió a los jóvenes del partido que la petición de pacto nacionalista debería formularla también Esquerra Republicana de Cataluña, ya que un posible acuerdo depende de los dos partidos, y no se ha mostrado excesivamente optimista sobre la posibilidad de lograr el apoyo de los republicanos.