«En estos momentos hubiese sido más fácil no asumir algunas responsabilidades porque electoralmente las DOT, al igual que la ley turística, afectan a intereses particulares, pero nosotros estamos para gobernar», admitió Matas, quien reiteró que en ningún caso el sector turístico se verá obligado a financiar el coste de las directrices. Sobre este asunto, Jaume Matas precisó que será el sector público el que financie las DOT, y añadió que el Govern ya ha realizado una previsión económica de lo que va a costar la desclasificación de suelo a lo largo de 1999, aunque el presidente balear se negó a desvelar la cifra concreta.
«Soy consciente que esta ley no es perfecta, pero había que
tomar esta medida porque no había otro camino», agregó el
presidente balear.
El máximo responsable del Ejecutivo subrayó que el PP «es un
partido que representa al 50 por ciento de la sociedad balear
mientras los demás partidos juntos, aunque hablen cinco veces cada
uno, casi no representan lo mismo que nosotros». Matas rechazó que
en el PP exista el convencimiento de que en 1999 pueda perderse la
Presidència de la Comunitat. «He hablado con mucha gente de mi
partido y creen que vamos a ganar las elecciones porque ofrecemos
la única oferta seria», afirmó Matas, quien coincidió con la
postura de Joan Verger para quien el PP no debe confiarse ante las
próximas elecciones. «Lo importante es presentar un buen programa
electoral a diferencia de los otros partidos, que sólo se preocupan
de repartirse cargos y puestos», criticó el líder del
Ejecutivo.