El número de vehículos que desembarcan en los puertos de Palma y Alcúdia no deja de crecer y en un solo año han aumentado en 15.200, según datos de la Autoritat Portuària de Balears (APB). Mallorca recibió 363.394 en 2023, mientras que en 2024 fueron 378.609, un 4,1 % más. Antes de la pandemia llegaron 282.695 vehículos, por lo que el año pasado se registraron 95.914 más en solo cinco años, una tendencia ascendente que permite cuantificar los graves problemas de congestión que hay en las carreteras de la Isla. Esta situación, además, da más argumentos al Consell para regular la entrada de coches de alquiler, con matrícula extranjera o procedentes de la Península.
Estos datos de la Autoritat Portuària tienen en cuenta tanto automóviles en régimen de pasaje, como motos, coches, furgonetas y autobuses, y en régimen de mercancía, principalmente coches de alquiler y destinados a la venta. Los camiones que van y vienen continuamente en los ferris con el fin de abastecer a cada isla no se incluye en los registros porque los desvirtuarían.
El puerto de Alcúdia es el que recibe más coches extranjeros porque está conectado directamente con la ciudad francesa de Toulon, desde donde embarcan los turistas europeos con sus propios coches. Poco antes de la pandemia la compañía Costica Ferries conectó con Francia este puerto mallorquín y el de Ciutadella, que es de gestión autonómica. En 2023 llegaron 15.908 y al año siguiente 16.878. Estas cifras se refieren a los turismos con matrícula extranjera, que son los que el Consell quiere regular. Del cálculo se excluyen aquí motos, furgonetas o autobuses, que no se restringirían.
El gobierno insular aspira a que los extranjeros no residentes que tengan una vivienda en propiedad en Mallorca solo puedan tener un coche por casa y siempre que paguen el impuesto de circulación en la Isla. Así se establece en el borrador de la futura ley que se está negociando con la oposición y que, de salir adelante, podría aplicarse antes de verano del año que viene.
Otro dato destacado facilitado por la Autoritat Portuària cuantifica los vehículos con o sin matrícula que llegan al puerto de Palma. El año pasado desembarcaron 52.550, que corresponden en su mayoría a coches de alquiler o destinados a la venta. Si bien no hay datos desglosados.
La futura ley prevé que los rent a car que no informen de las matrículas de todos los vehículos que traigan a Mallorca se podrán enfrentar a multas de hasta 30.000 euros en caso de cometer infracciones «muy graves». También se prevé la inmovilización temporal del vehículo por un periodo de hasta cuatro meses o incluso la retirada de la autorización para circular y que no se pueda obtener otra en dos años.
Nuestros políticos, una vez más, han fracasado a la hora de mirar por su gente y su tierra.