Los expertos alertan que los altercados de Torre Pacheco podrían producirse en Mallorca. Este pasado fin de semana un grupo de radicales ha iniciado una «cacería de inmigrantes» y se han producido importantes altercados en ese pueblo de Murcia. Los disturbios se produjeron tras la brutal agresión sufrida el pasado miércoles por un vecino de la localidad, Domingo T.M., de 68 años, quien, según ha relatado él mismo a diversos medios, fue atacado por unos jóvenes, presuntamente de origen magrebí. Sin embargo, hasta el momento, esto no ha podido ser confirmado, pero la extrema derecha lo ha utilizado para difundir bulos y atacar a los inmigrantes.
Ante esta situación, cabe preguntarse si estos hechos podrían producirse en Mallorca. «Sin ninguna duda», responde Julián Claramunt, miembro de Passes Perdudes. A su modo de ver, «pese a que la sociedad mallorquina tiende a ser poco agresiva en sus reacciones política, pero un evento puntual y espontaneo como el de Torre Pacheco se podría reproducir».
Por su parte , el politólogo Guillermo Bezzina añade que «aunque no se hayan producido altercados similares por el momento, tampoco estamos al margen de estas dinámicas. Somos una comunidad autónoma con una elevada proporción de población extranjera, especialmente magrebí y latinoamericana».
Bezzina considera que pese a que «el modelo económico de Mallorca es diferente, con un peso predominante del sector servicios, este mismo modelo turístico genera una fuerte precariedad laboral, dificultades de acceso a la vivienda y una sensación de bloqueo vital que alimenta el malestar. Además, el uso intensivo de redes sociales como canal informativo está muy extendido entre la juventud de la Isla».
El citado politólogo recuerda que «Palma fue una de las capitales donde Vox obtuvo mejores resultados en las elecciones municipales de 2023, superando el 20 % de los votos. En barrios como Son Gotleu o Foners-La Soledad, precisamente donde la presión migratoria es mayor, Vox fue la segunda o incluso la primera fuerza política. Por tanto, aunque existen diferencias notables con el caso de Torre Pacheco, no puede descartarse que en determinadas zonas de Mallorca puedan producirse tensiones o altercados similares».
Gonzalo Adán, director del Instituto Balear de Estudios Sociales (IBES), se muestra más cauto de las opiniones vertidas con anterioridad. En su opinión, «la enorme dependencia del turismo y del sector servicios, junto a las elevadas tasas de abstención electoral, y por lo tanto revindicativa, hacen que Mallorca sea poco propicia a estos altercados o manifestaciones de rechazo». No obstante, admite que «es un problema latente, de momento sordo, pero no es descartable que se contagie de otras zonas. El problema de la inmigración ilegal va a más en todos los sitios».
¿El problema se incrementa en las segundas generaciones?
A nivel nacional, algunos expertos apuntan que el problema en Torre Pacheco se ha incrementado en las segundas generaciones de inmigrantes. Bezzina selaña que «evidentemente un municipio que tiene el 30 % de población extranjera, principalmente de origen marroquí, supone un reto para la gestión de la inclusión social. Cabe recordar que si tiene este 30 % es porque el pueblo se dedica al sector primario, trabajadores del campo. Un sector fuertemente precarizado donde a los extranjeros aún se les genera más precarización. Crecer en un contexto así, seas español o no, de falta de expectativa, de frustración genera rabia, y probablemente afecta obviamente al comportamiento de la segunda generación».
No obstante, asegura que« no creo que el problema sea suyo, sino de la combinación del contexto en el que han crecido y cada una de sus situaciones personales, sumado a todo lo anterior de la normalización de los discursos de odio».
En Pere Garau capaz que sí