La científica marina mallorquina Gádor Muntaner ha publicado su primer libro, La sonrisa de los tiburones. Historias de amor por el océano, editado por geoPlaneta, con el objetivo, entre otros, de romper con el desconocimiento generalizado de que la Tierra está formada casi en un 70 % por agua salada.
Muntaner, especialmente conocida por sus estudios sobre los tiburones (ha protagonizado un documental televisivo sobre esa faceta científica), destaca de los escualos que «si bien son muy grandes y unos potentes depredadores, frente a los que podríamos conservar un cierto instinto de alerta proveniente de nuestro pasado, pertenecen al medio marino y, por tanto, se alimentan de él, por lo que, en el extenso y variado menú que el océano les ofrece, no se encuentra el ser humano».
La bióloga señala que «los tiburones son grandes depredadores esenciales para la supervivencia de los océanos y, por ende, para la nuestra como seres humanos. Las primeras especies de tiburón aparecieron hace más de cuatrocientos millones de años, mucho antes que los dinosaurios y muchísimo antes que los primeros homínidos. Así como los dinosaurios y tantas otras especies no fueron capaces de sobrevivir a los grandes cambios climáticos y las extinciones masivas, los tiburones sí lo hicieron».
Gádor Muntaner indica que «al ser grandes depredadores, los tiburones se sitúan en la cima de las cadenas tróficas marinas. Se trataría del último y más alto eslabón de la pirámide. Por ello, son piezas clave en los ecosistemas marinos, ya que juegan un papel esencial en la regulación de su equilibrio»
En el libro, Muntaner expresa que «estoy enamorada del mar desde que tengo uso de razón. La imagen que captó mi retina a los tres o cuatro años de edad, en mi primera inmersión con una máscara, un tubo y unas aletas, en las aguas tranquilas y cristalinas de Mallorca sigue aún viva en mi mente. Ahora que ya tengo experiencia, puedo decir que aquello fue un flechazo a primera vista».
Deben ser tiburones veganos...