Reacción casi inmediata al anuncio que, este viernes, ha llevado a cabo el vicepresidente Antoni Costa sobre las medidas del ejecutivo de Prohens para paliar la masificación turística. La tasa que se impondrá a los vehículos de alquiler de coches ha enfadado a la patronal que considera que la medida sólo tiene un objetivo recaudatorio. Por su parte, los hoteleros consideran que el aumento que propone el Govern Balear en los meses de apogeo turístico, no ofrecerá los resultados esperados.
Baleval, patronal del alquiler de coches de Baleares, sostiene que la tasa «puede perjudicar al sector de coches de alquiler y no conseguirá descongestionar las carreteras de las islas», según ha expuesto en un comunicado. Asimismo, añaden que «se ha demostrado que los coches de alquiler no son los causantes de los atascos, ya que representan un porcentaje bajo del total del parque circulante».
La patronal ha señalado también que el nuevo impuesto podría crear «una doble imposición sobre elementos que están en otras normas a debate en los Consells insulares y provoca una enorme inseguridad jurídica, negativa para la inversión y el empleo en Baleares» y ha solicitado a las administraciones autonómica, insulares y municipales que se coordinen al respecto.
A pesar de las quejas, Baleval, representante del 85% de la flota de vehículos de alquiler, se ha puesto a disposición del Govern para mantener un diálogo «abierto y constructivo», aunque se cuestiona si la medida «atenta contra la libre circulación de personas y vehículos».
La reacción de los hoteleros
La Federación Empresarial Hotelera de Mallorca (FEHM) se ha opuesto al incremento del impuesto de turismo sostenible (ITS) planteado por el Govern al considerar que tendrá un impacto directo en la capacidad de gasto de los turistas, especialmente en los comercios, la restauración y el ocio. Sí han dado su visto bueno, en cambio, a las propuestas relacionadas con la lucha contra la oferta ilegal y la no permitir más plazas de alquiler vacacional en edificios plurifamiliares, aunque en este último ámbito han lamentado la falta de valentía.
Asimismo, celebran que buena parte de las medidas anunciadas este viernes por el Ejecutivo autonómico incluyan apartados que, en líneas generales, coinciden con algunas de las principales demandas del sector hotelero de la isla, como el cambio de los usos hoteleros en aquellos establecimientos que, por sus condiciones de obsolescencia o voluntad de salir del mercado, permitan su transformación en viviendas.
También ha dado su beneplácito a la prohibición de ampliar las plazas de alquiler vacacional en edificios plurifamiliares al considera que «es una necesidad real y una reclamación de la ciudadanía. Si se hubiera adoptado esta decisión hace tiempo habría evitado el crecimiento de 92.000 plazas, un 135%, en los últimos ocho años», sostiene.
La vicepresidenta ejecutiva de la patronal, María José Aguiló ha explicado que entre 2015 y 2023 el alojamiento tradicional en Mallorca creció en 19.000 plazas, un 6,6% mientras que las viviendas turísticas lo han hecho en 65.000, un 172%. «Por eso nos llama la atención poderosamente que no culminen con valentía las soluciones reales y que ya permitirían a corto plazo vivienda en el mercado. Las licencias familiares en plurifamiliares tienen que decaer», ha dicho Aguiló.
En esa línea, los hoteleros han defendido que la «verdadera valentía» reside en la no renovación de este tipo de licencias que «nacieron como temporales y que, como indica la propia norma, estaban condicionadas. La realidad social en relación con la dificultad de acceso a la vivienda, motivan sobradamente que estas autorizaciones desaparezcan y se restituya el uso residencial. Estas plazas deben decaer definitivamente e imposibilitar que sigan en activo bajo ningún concepto», han argumentado desde la FEHM.
No obstante, han proseguido, para solucionar el problema habitacional es necesaria una combinación de «muchas más fórmulas» que permitan liberar vivienda «de forma inmediata y no a medio largo plazo». Eso, sumado a la «persecución intensiva» de la oferta ilegal, conduciría a la reducción del número de visitantes.
Todas las medidas puestas sobre la mesa por el Ejecutivo autonómico referentes a la lucha contra la oferta ilegal son acertadas, a juicio de la federación hotelera. «Pero lo importante no es únicamente que estén plasmadas en el futuro decreto ley, sino contar con los recursos y los medios para perseguirla concienzudamente y erradicarla», ha matizado. En concreto, han subrayado la importancia de dotar de medidas que favorezcan la mejora de la calidad de la oferta turística en todos los sectores para poder elevar la calidad global del destino. A su vez, ha indicado la FEHM, la administración debe adoptar un rol activo en la modernización adaptación de los espacios públicos, lo que redundaría positivamente tanto en los residentes como en los visitantes.
No a la subida del ITS
Respecto a la subida del ITS en los meses de junio, julio y agosto anunciada por el Govern, los hoteleros mallorquines han reiterado su «absoluta oposición» al considerar que el objetivo que persigue esta medida no es acorde con los resultados que se obtendrán. Tampoco está alineado con los motivos que llevaron a la implementación del tributo, por lo que el Ejecutivo regional estaría incurriendo en un error de planteamiento.
«Toda carga impositiva adicional impactará directamente en la capacidad de gasto en destino de los turistas, espacialmente en comercio, restauración y ocio», ha advertido la patronal. «La FEHM ha sido muy clara sobre la eficacia del ITS, que afectará mucho a determinados segmentos de alojamiento y restará capacidad de gasto. Vamos a ver cómo acaba el desarrollo de estas propuestas y seguiremos siendo propositivos y alineándonos con los objetivos de mejora y sostenibilidad del destino, como hemos hecho siempre», ha concluido la vicepresidenta educativa.